El origen de esta crema es inglesa. En Inglaterra se servía a la hora del té acompañado de scones, unos pequeños bollitos de pan, que suelen tomarse templados y abiertos por la mitad.

Su textura cremosa es perfecta para el relleno de tartas, pasteles, cupcakes... y hay a quien le gusta simplemente untada en una rebanada de pan.

La palabra curd significa, flan o cuajada.

Ingredientes

250 g de azúcar

8 tiras de piel de limón (solo la parte amarilla)

180 g de zumo de limón

120 g de mantequilla

4 huevos

Preparación

Ponga en el vaso el azúcar y pulverice 30 seg/vel 10.

Añada la piel de limón y pulverice de nuevo 30 seg/vel 10.

Con la espátula, baje los ingredientes hacia el fondo del vaso. Añada el zumo de limón, la mantequilla y los huevos y programe 20 min/90°C/vel 4. Vierta en un tarro de cristal con tapa, deje enfriar y conserve en el frigorífico hasta su utilización.

Sugerencias y trucos

Se conserva perfectamente durante un mes dentro de un tarro de cristal en el frigorífico.

Puede preparar la crema de naranja: sustituya la piel de limón por piel de naranja y el zumo de limón por zumo de naranja.